Este es un post raro. El primero, y que siempre será el último de la fila. Ahora mismo me encuentro escribiendo para mi mismo. No hay ningún tipo de audiencia. Al menos es algo que creo me ayuda a ordenar mis ideas.
¿Y por qué un blog? a estas alturas de la vida…esto ya pasó de moda. Ni siquiera lo hago para posicionar. Si fuera tendría que atiborrar esto de palabras clave y demás triquiñuelas. Me guardo la baza de tratar de camelar a Google en algunos post, pero básicamente escribo porque sí. Porque me apetece, y el día que deje de apetecerme no me sentiré obli
No me gusta la deriva que esta tomando el mundo de la fotografía. Por concretar un poco más, no me siento muy cómodo con la manera en la que consumimos las imágenes hoy en día. Para empezar, creo que no incentiva la reflexión. Hoy día las fotografías se pierden en scrolls infinitos y todo el proceso reflexivo de un fotógrafo se puede ir al carajo en cuestión de milésimas de segundo. Pero sin ponernos tan transcendentales. El esfuerzo que hay detrás de cada toma , y cuando hablo de esfuerzo hablo en todas sus variantes. El físico, el emocional y el económico. Lo que viene siendo “dejarse la piel” por hacer una buena foto.
Ganadería intensiva. Producir y producir.